Ciberseguridad en la empresa: riesgos, buenas prácticas y formación interna
La ciberseguridad se ha convertido en uno de los grandes retos para las empresas en la era digital. La creciente dependencia de la tecnología, el trabajo en red y el uso continuo de herramientas digitales han ampliado la superficie de exposición a posibles ataques. Hoy, proteger la información ya no es solo una cuestión técnica, sino una responsabilidad compartida que afecta a toda la organización.
Para entender la magnitud del problema, basta con un dato revelador: cada 39 segundos se produce un intento de ciberataque en el mundo. Un recordatorio claro de que ninguna empresa, independientemente de su tamaño o sector, está completamente a salvo.
¿Qué entendemos por ciberseguridad en la empresa?
La ciberseguridad empresarial engloba el conjunto de medidas, prácticas y protocolos destinados a proteger los sistemas, los datos y la operativa digital de una organización frente a accesos no autorizados, ataques maliciosos o pérdidas de información.
No se trata únicamente de evitar que un sistema “se caiga”, sino de salvaguardar:
- Información sensible de la empresa
- Datos de clientes y proveedores
- Credenciales y accesos internos
- Reputación corporativa
- Continuidad del negocio
En este contexto, la ciberseguridad deja de ser un asunto exclusivo del departamento de IT para convertirse en un pilar estratégico de la gestión empresarial.
Principales riesgos de ciberseguridad a los que se enfrentan las empresas
Las amenazas digitales evolucionan constantemente y, en muchos casos, se aprovechan de errores humanos más que de fallos técnicos. Algunos de los riesgos más habituales son:
- Phishing y correos fraudulentos: mensajes que suplantan a empresas o personas de confianza para obtener datos sensibles.
- Robo de contraseñas: uso de credenciales débiles o reutilizadas en varias plataformas.
- Suplantación de identidad: intentos de hacerse pasar por directivos, proveedores o compañeros para solicitar acciones urgentes.
- Ransomware: secuestro de datos a cambio de un rescate económico.
- Uso inseguro de dispositivos y redes: conexiones WiFi públicas, equipos sin actualizar o accesos sin doble autenticación.
Lo más relevante es que muchos de estos ataques comienzan con una simple acción cotidiana, como abrir un correo o hacer clic en un enlace.
El factor humano: la primera línea de defensa digital
Uno de los grandes aprendizajes en materia de ciberseguridad es que las personas son tanto el principal riesgo como la mejor protección. La mayoría de los ciberataques exitosos no se producen por sistemas obsoletos, sino por desconocimiento, falta de atención o ausencia de hábitos digitales seguros.
Cualquier persona dentro de la empresa puede convertirse en objetivo de un ataque, no solo los perfiles técnicos. Por eso, crear una cultura de prevención y concienciación resulta fundamental para reducir riesgos y reforzar la seguridad global de la organización.
Nuestra experiencia en Grupo Assista: formación en ciberseguridad para todo el equipo
Conscientes de esta realidad, en Grupo Assista hemos apostado por la formación interna como herramienta clave de prevención. Durante los meses de noviembre y diciembre, todo el personal de oficina ha participado en la formación “Ciberseguridad en la empresa”, impartida por Talenmo, consultora especializada en formación corporativa y desarrollo de competencias profesionales.
Se trata de una formación dirigida a perfiles no técnicos, pensada para trasladar conceptos claros y aplicables al día a día. Lejos de enfocarse en aspectos complejos, el objetivo ha sido hacer visible cómo pequeñas acciones pueden marcar la diferencia en la seguridad digital.
Durante la formación se han abordado cuestiones tan prácticas como:
- Cómo detectar correos sospechosos o intentos de suplantación bien elaborados
- La importancia de utilizar contraseñas seguras y únicas
- Comprobar si un correo o una cuenta ha sido afectada por alguna filtración
- Activar la doble autenticación, tanto en herramientas profesionales como personales
- Entender las amenazas actuales y cómo prevenirlas con gestos sencillos
Este enfoque ha permitido generar conciencia real sobre un hecho clave: la ciberseguridad no termina al salir de la oficina, sino que los hábitos digitales personales también influyen en la seguridad profesional.
Beneficios de formar a los empleados en ciberseguridad
La formación en ciberseguridad aporta ventajas claras y medibles para cualquier empresa:
- Reducción del riesgo de incidentes provocados por errores humanos
- Mayor responsabilidad individual en el uso de herramientas digitales
- Protección de la información corporativa y de terceros
- Mejora de la confianza interna y externa
- Refuerzo de la cultura corporativa basada en la prevención
Invertir en formación no solo protege sistemas y datos, sino que empodera a las personas y mejora la resiliencia de la organización frente a amenazas externas.
Ciberseguridad y gestión empresarial responsable
Hoy en día, la ciberseguridad forma parte de una gestión empresarial responsable y alineada con las buenas prácticas. Proteger la información, anticiparse a riesgos y formar a los equipos no es solo una cuestión operativa, sino también de compromiso con la calidad, la seguridad y la continuidad del negocio.
Cada vez más, clientes y partners valoran que las empresas adopten medidas preventivas y demuestren una gestión consciente de los riesgos digitales.
La prevención empieza por el conocimiento
La ciberseguridad ya no es un tema opcional ni exclusivo de especialistas. Es una realidad que afecta a todas las empresas y a todas las personas que forman parte de ellas.
La experiencia nos demuestra que formarse, entender los riesgos y aplicar buenas prácticas en el día a día marca la diferencia. Porque, frente a amenazas cada vez más sofisticadas, la mejor protección sigue siendo una organización informada, responsable y preparada.
En Grupo Assista continuamos apostando por una cultura de prevención y seguridad digital, convencidos de que la ciberseguridad empieza por las personas.
